AMPLIARLula en la ONU, ayer

22/09/2024 - Encuentro

En la Cumbre del Futuro, Lula habla de la "falta de audacia" de la ONU

En su primer discurso de este viaje a Nueva York, ante la Asamblea de las Naciones Unidas (ONU), el Presidente Luiz Inácio Lula da Silva dijo que el Pacto para el Futuro, documento que será firmado por los líderes mundiales en la ciudad norteamericana, señala una dirección a seguir, pero le falta “ambición y audacia” para que la entidad pueda cumplir su papel.

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El presidente brasileño habló durante la Cumbre del Futuro, celebrada ayer domingo. Según él, la crisis de la gobernanza global requiere transformaciones estructurales y citó los recientes conflictos armados que existen hoy en el mundo.

“La pandemia, los conflictos en Europa y Medio Oriente, la carrera armamentista y el cambio climático han revelado las limitaciones de los organismos multilaterales. La mayoría de los organismos carecen de la autoridad y los medios de implementación para hacer cumplir sus decisiones. La Asamblea General perdió su vitalidad y el Consejo Económico y Social quedó vacío”, dijo Lula al intervenir en la Cumbre del Futuro.

El año pasado, Brasil no logró aprobar una resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre el conflicto entre Israel y el grupo palestino Hamás, que controla la Franja de Gaza. En ese momento, el voto de Estados Unidos –miembro permanente– hizo inviable la aprobación, incluso después de largas negociaciones de la diplomacia brasileña. Otras resoluciones presentadas también fracasaron, ya sea por votos en contra de Estados Unidos o Rusia, otro Miembro Permanente. Según las normas del Consejo de Seguridad, para que una Resolución sea aprobada se requiere el apoyo de nueve de los 15 miembros en total, sin que ninguno de los miembros permanentes pueda vetar el texto.

Pacto de Futuro

El evento previo a la Asamblea General de la ONU reúne a líderes mundiales para debatir formas de enfrentar las crisis de seguridad emergentes, acelerar el logro de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y abordar las amenazas y oportunidades de las tecnologías digitales.

Lula señaló que los aspectos positivos del Pacto abordan “de una manera sin precedentes” cuestiones importantes como la deuda de los países en desarrollo y la tributación internacional; la creación de un foro de diálogo entre jefes de Estado y de gobierno y líderes de instituciones financieras internacionales. Lo que, según Lula, promete volver a poner a la ONU en el centro del debate económico global.

El presidente también citó el avance hacia una gobernanza digital inclusiva que “reduzca las asimetrías de una economía basada en datos y mitigue el impacto de nuevas tecnologías como la inteligencia artificial”. “Todos estos avances serán encomiables y significativos, pero aun así nos falta ambición y audacia”, afirmó.

También criticó al Consejo de Seguridad de la ONU, afirmando que la legitimidad del organismo se reduce "cada vez que aplica dobles raseros o permanece en silencio ante las atrocidades". Para Lula, las instituciones bretonas, como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, ignoran las prioridades y necesidades del mundo en desarrollo.

“El Sur Global no está representado de manera consistente con su peso político, económico y demográfico actual”, afirmó.

El presidente dijo que hubo pocos avances en la agenda de reformas multilaterales del sistema de la ONU en los últimos 20 años y citó como medidas positivas la Comisión de Consolidación de la Paz, creada en 2005 y el Consejo de Derechos Humanos, creado en 2006.

También advirtió que los objetivos de desarrollo sostenible, si bien fueron la mayor “aventura diplomática de los últimos años”, van camino de convertirse en “nuestro mayor fracaso colectivo”.

“Al ritmo actual de implementación, sólo el 17% de los objetivos de la agenda 2030 se alcanzarán dentro del plazo. En la presidencia del G20, Brasil lanzará una alianza global contra el hambre y la pobreza, para acelerar la superación de esos flagelos”, habló.

Lula también afirmó que, si se mantiene el ritmo actual, los niveles de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y de financiación climática serán insuficientes para mantener el planeta seguro. “En asociación con el secretario general [de la ONU, António Guterres], en preparación para la COP30, trabajaremos hacia una evaluación ética global, reuniendo a diferentes sectores de la sociedad civil para pensar en la acción climática desde la perspectiva de la justicia, la equidad y de solidaridad”, continuó.

Derechos humanos

En su discurso, Lula dijo que el mundo tiene la responsabilidad de no dar marcha atrás en la agenda de derechos humanos y promoción de la paz.

“No podemos dar marcha atrás en la promoción de la igualdad de género, ni en la lucha contra el racismo y todas las formas de discriminación. Tampoco podemos volver a vivir con amenazas nucleares. Es inaceptable regresar a un mundo dividido en fronteras ideológicas o zonas de influencia. Naturalizar el hambre de 733 millones de personas sería vergonzoso. Retroceder en nuestros compromisos es poner en tela de juicio todo lo que con tanto esfuerzo hemos construido”, afirmó.

“Necesitamos coraje y voluntad política para cambiar y crear el mañana que queremos hoy. El mejor legado que podemos dejar a las generaciones futuras es una gobernanza capaz de responder eficazmente a los desafíos que persisten y a los que surgirán”, afirmó el presidente al finalizar su discurso.

Futura Cumbre y Asamblea General

La Cumbre para el Futuro es un evento paralelo a la Asamblea General de la ONU. Del evento surgió un documento, aprobado este domingo. Fue negociado entre los estados miembros para fortalecer la cooperación global y establecer compromisos para una mejor adaptación a los desafíos actuales, para el futuro de un multilateralismo renovado y eficaz, en beneficio de las generaciones futuras.

El martes (24), el presidente pronunciará el tradicional discurso de apertura de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Por tradición, desde la décima sesión de la cumbre, el presidente de Brasil es siempre el primer país en hablar.

La Asamblea General de las Naciones Unidas es uno de los principales órganos de la ONU y reúne a los 193 estados que forman parte de la organización, teniendo cada nación derecho a un voto. Para Brasil, la apertura del Debate General de la asamblea permite presentar las prioridades del país, tanto a nivel interno como internacional.

Fuente: Agencia Brasil