AMPLIARParis

09/01/2020 - Francia

Recrudecen las protestas, choques y heridos

En el día 36 de la huelga, las protestas contra la reforma de las jubilaciones se expresó, otra vez, en las calles de Francia, donde cientos de miles marcharon en decenas de ciudades, mientras en la capital reaparecieron los "black bloc", quienes al final de la jornada se enfrentaron con la policía.

Mientras tanto, a la espera de la reunión de mañana y de una nueva manifestación, prevista para el sábado, el gobierno se pone rígido sobre la llamada "edad del equilibrio", el punto más disputado de la reforma.

    Para la cuarta cita desde el inicio de las movilizaciones, el pasado 5 de diciembre, la marcha parisina -con 370.000 personas para la CGT, 44.000 para el colectivo de medios independientes, y 56.000 según el Ministerio del Interior- se produjo desde la Place de la Republique hasta Saint-Austin, plaza relativamente pequeña y en riesgo.

    Hoy, durante una hora, varias personas con pasamontañas en sus caras dieron lugar a una guerra de guerrillas contra la policía, que hizo un uso intensivo de gases lacrimógenos. Fueron destruidos muchos escaparates, bancos y agencias de seguros, además de mobiliario urbano: todo mientras la marcha pacífica todavía tenía que llegar entre la Saint-Lazare y Saint-Augustin. El saldo fue de 20 heridos, casi todos policías, además de 24 detenidos. Para la CGT, el sindicato más duro, la movilización está creciendo, pues, en la primera marcha en París, el pasado 5 de diciembre, hubo 250.000 personas. Hay una diferencia muy grande entre recuentos independientes y los policiales, que ven que la participación ha disminuido ligeramente.

    En toda Francia, los recuentos independientes hablan de un total de 300.000 manifestantes.

    En la movilización, las demandas de los diversos sindicatos son menos diferentes que al principio: si la CGT, Force ouvriere y los más duros continúan pidiendo la retirada pura y simple del proyecto de reforma, que debe presentarse en el Parlamento el próximo 17 de febrero, es común a todos la necesidad inalienable de la retirada por parte del gobierno de la "edad del equilibrio". Se trata del punto crucial del tira y afloja entre el gobierno y los interlocutores sociales: además del sistema de puntos, base de la reforma, el proyecto prevé la edad de 64 años para obtener la jubilación completa: saliendo antes se penaliza penalicen, si hay demoras hay bonificaciones. Incluso Laurent Berger, secretario de la moderada CFDT, un elemento clave para el gobierno si quiere llegar a un acuerdo, no quiere saber nada con esa propuesta. Muchos esperaban que el compromiso pudiera efectivizarse mañana, el día en que el primer ministro Edouard Philippe convocó a los interlocutores sociales a una conferencia sobre la cobertura financiera de las pensiones.

    Y, en cambio, esta noche, con los manifestantes todavía en la plaza, una entrevista del Ministro de Cuentas Públicas, Gerald Darmanin, anticipada por Le Figaro, redujo los entusiasmos, al declarar que "la edad del equilibrio es una medida justa y eficaz". "Sin duda, tendremos que trabajar un poco más", aseveró. Mientras tanto, los líderes sindicales se preparan para la movilización del sábado, que esperan sea masiva.

    En ese contexto, sigue el bloqueo del transporte. (ANSA).