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AMPLIARVviviendas antiguas en La Hahana

Viviendas son un problema social complejo en Cuba

El sector "no estatal" y la inversión extranjera deben cooperar con el Estado cubano para resolver el agudo déficit nacional de viviendas, el problema social más complejo del país, según el criterio gubernamental.

Detalles.

El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, que participó en una conferencia del ministerio de la Construcción en La Habana, expuso en un discurso que las necesidades actuales de la rama constituyen "el problema social más complejo del país".

El ministerio de la Construcción divulgó durante el encuentro que en 2018 fueron terminadas en el país 30.437 casas en conjunto por el sector estatal y la población, un incremento de 8.610 edificaciones con respecto a 2017. Estadísticas publicadas en noviembre del año pasado indicaron que el déficit habitacional en ese momento era de 929.695 viviendas. Entonces, se señaló que era necesario construir nuevas unas 527.000 casas y rehabilitar 402.000.

El presidente, Miguel Díaz-Canel, pidió durante el encuentro un "perfeccionamiento del trabajo" de "las formas de gestión no estatal, a fin de vincularlas más en función de los programas económicos y sociales en marcha", como el de viviendas.

También en la misma línea reiteró el concepto de "fomentar la inversión extranjera".  

"Cuando nos están atacando tanto y montando una matriz de que estamos detenidos o atrasándonos, hay que decir lo que hacemos y cómo", estimó.

Alentó al sector a "avanzar en la informatización, la automatización y en la investigación, con la particularidad de la doble vía en esta última, para que los profesores y estudiantes conozcan las nuevas tecnologías introducidas en la nación", afirmó.

La rama habitacional es una de las más afectadas en la economía nacional. Hasta finales de la década de los años 80 el estado mantuvo programas de construcción de nuevos apartamentos en edificios "prefabricados", montados con piezas ya construidas, con una mano de obra extraída de centros laborales.

Se divulgó en resumen que desde inicios de la década de los años 60 del siglo pasado se edificaron en la isla más de 2.568.000 viviendas. Las casas existentes ahora son más de 3.800.000.

Tras la crisis en el país a causa de la caída de la URSS a inicios de los años 90, el paso de fabricación habitacional prácticamente se detuvo. Huracanes y el deterioro empeoraron la situación.

Programas posteriores que incluyen permisos para que el ciudadano común construya o repare sus casas a partir de préstamos financieros y ayudas estatales permitieron una reanudación paulatina.  

Durante la reunión ahora, el ministro cubano de la Construcción, René Mesa, llamo a "multiplicar" la edificación de viviendas para la población, ante los problemas en la infraestructura habitacional nacional.

Una política especial para la vivienda fue aprobada por el parlamento cubano en diciembre último. Este coloca énfasis en la producción y control por entidades de gobierno de materiales de construcción por sectores y áreas, y las necesidades precisas en estas.