Christian Stein, funcionario de la localidad de Potsdam-Mittelmark, dijo que “durante la noche logramos colocar bajo control al incendio” ya que muchos sectores fueron extinguidos. Pero advirtió que siguen ardiendo las llamas alrededor de las localidades de Klausdorf y Tiefenbrunnen.

Los habitantes de otro poblado llamado Frohnsdorf pudieron regresar a sus casas el viernes.

Los bomberos tienen que trabajar con sumo cuidado porque en la zona hay municiones de la Segunda Guerra Mundial que quedaron enterradas allí.