AMPLIARErnesto Klass

20/08/2018 - exposiciones

Klass muestra sus "imágenes desequilibradas, caseritas y levitantes"

“¡Mostrá esas fotos! (imágenes desequilibradas, caseritas y levitantes)” se denomina una muestra de fotografías humorísticas que Ernesto Klass inaugurará el próximo viernes 24 de agosto, a las 21.30, en la nueva sala de arte Citá, Lamadrid 1457 (zona de El Abasto).

 Se trata de un nuevo espacio de arte y teatro dirigido por Fernando Ríos, donde esa noche, además, el plástico Esteban Koukas hará una instalación y, luego de la apertura, tocará Matías Manzur Banda.

Las palabras de apertura de ¡Mostrá esas fotos! serán dichas por Pablo Arlati y Sebastián Uro; y los trabajos –que estarán colgados hasta el 23 de septiembre- podrán apreciarse de miércoles a domingos, de 17.00 a 24.00

Klass, que es músico y ejerció el periodismo cultural muchos años, ofrecerá una treintena de imágenes en las que el humor se manifiesta en levitaciones, desdoblamientos, con mucho de gag físico derivado del cine mudo, referencias a Los Beatles y el cómic.

“Es para mí un lugar hermoso de creación y aspiro a que esta muestra sea el comienzo de un recorrido largo; tengo mucho material y las ideas siguen chispeando en mi cabeza”, explica Ernesto.

“En gran medida fueron los comentarios de la gente, sus alegrías y saludos los que me dieron coraje para estar esta noche aquí, empezando a andar con mis imágenes. Mi paso por el periodismo me acercó a gente “inspirada”, pero esta vez soy yo el actor, el pintor y el andador por radios y redacciones contestando preguntas. Como verán, como ya saben, son imágenes con una tensión humorística o poética (en el fondo son la misma cosa) que las hace diferentes”, añade.

Por su parte, Claudio Suay –periodista y crítico de cine de Buenos Aires- apunta en el catálogo que “la mayoría de las obras, instalaciones o como se las quiera llamar de Ernesto están armadas en el fantasmal patio interior de su casa. Un lugar donde de manera inverosímil entra el sol,  donde su perra hace caca y él pretende volar. Y vuela. Y crea un espacio propio lleno de extraños y pleno de sensaciones de libertad donde sin querer busca, lo testimonian sus haceres, encontrarse consigo mismo. En otros planos, al decir de  Machado, ingrávidos y gentiles como pompas de jabón. Klass no transforma lo que se imagina y desea  en una realidad ficcional, como lo hacen el cine o la novela, sino que sale del molde y pone la vida real en el terreno de la ilusión”.