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AMPLIARSu cargo durará hasta fin de año

Nuevo jefe de Corte Suprema de Perú asumió tras escándalo de audios

El juez Víctor Prado asumió ayer como nuevo presidente de la Corte Suprema de Perú, tras el escándalo de audios comprometedores que causó la renuncia de su antecesor. Ceremonia.

Detalles.

"Atacaremos los problemas relacionados con la corrupción, con la falta de recursos. Confíen por favor, este es un compromiso de todo el Poder Judicial", dijo Prado tras ser elegido por los demás miembros del máximo tribunal del país.

Prado permanecerá en el cargo sólo hasta fin de año para completar el periodo de su antecesor Duberlí Rodríguez, quien dimitió hace seis días luego de la divulgación de los audios de tráfico de influencias y venta de sentencias.

La Corte Suprema está en sesión permanente "debido al estado de emergencia dispuesto en todas las cortes superiores del país, como resultado de los últimos actos de corrupción que vinculan a jueces", dijo Prado.Agregó que pedirá a los peruanos “una nueva oportunidad para recuperar su confianza y credibilidad" y que presentará al Ejecutivo y al Congreso propuestas para una reforma judicial.

Los audios del escándalo fueron grabados por la policía en el marco de una investigación de la fiscalía y comenzaron a ser divulgados el 8 de julio por el portal de periodismo de investigación IDL-Reporteros y después por otros medios.

El presidente de la corte de apelaciones del Callao, César Ríos, fue puesto en prisión preventiva por 18 meses y fue suspendido el magistrado César Hinostroza, de la Corte Suprema.

El Congreso declaró el lunes en emergencia por 90 días al Consejo Nacional de la Magistratura, órgano encargado de nombrar a jueces y fiscales, cuyos siete integrantes ya habían renunciado por el escándalo.

Los dardos apuntan ahora al nuevo fiscal general, Pedro Chávarry, quien asumió su cargo el viernes en medio del escándalo, un día después de que se divulgara una conversación telefónica con el juez Hinostroza.

Chávarry había sido elegido para el cargo antes de que estallara el escándalo y desestimó los llamados a dar un paso al costado.