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AMPLIAR'La habitación de Van Gogh en Arles', una emblemática pintura con bermellón extraído de la grana cochinilla.

Un insecto mexicano que da rojo al arte

Vivieron en épocas distintas y, salvo excepciones, pintaron con estilos muy contrastantes, pero grandes maestros de la pintura como Vincent van Gogh, Tintoretto o Rubens tienen algo en común: usaron un colorante para sus obras obtenido de un insecto mexicano.

En la lista de los genios del pincel que emplearon la llamada "grana cochinilla" -también "rojo mexicano"- figuran figuras como Velázquez, Eugene Delacroix o Velázquez. Los miembros de este selecto club por primera vez aparecen reunidos desde mañana en El Palacio de Bellas Artes, el máximo altar de la cultura mexicana, con una colección de pinturas elaboradas precisamente a base de esta tintura.

    La grana cochinilla se volvió muy popular entre los artistas de Europa tras la llegada de los conquistadores españoles.

    La producción del colorante obtenido de una secreción de este insecto comenzó en la época prehispánica pero se convirtió en el segundo producto más exportado de México, detrás de la plata, entre el siglo XVI y mediados del XIX.

    El rojo carmín obtenido del hemíptero (especie a la que pertenecen tambien las chinches y las cigarras) permitió a los grandes exponentes de la pintura ampliar su paleta de tonalidades tras el descubrimiento de este insecto mexicano.

    La grana cochinilla es un parásito de plantas perteneciente a la familia "dactylopius coccus", cuyos huéspedes son los nopales o tunas, una suerte de cactus que dan frutos comestibles muy populares en la cocina mexicana, de sabor muy dulce y de consistencia acuosa.

    Antiguamente, el colorante servía para teñir las vestimentas especialmente de la nobleza y en particular la clase aristocrática, los guerreros y los sacerdotes en las civilizaciones prehispánicas, pues era símbolo de estatus y marcaba claramente la casta o jerarquía.

    Las prendas también eran empleadas en las más fastuosas ceremonias y por lo que el pigmento obtenido competía con ventaja con el que se extraía de plantas y otros animales.

    Del cuerpo desecado de la cochinilla hembra se obtiene el ácido cármico, que es el colorante rojo intenso empleado con mayor intensidad con la llegada de los españoles, que trajeron ganado ovino y lo usaron para colorear las prendas a base de lana.

    La cría del insecto no es sencilla pero los indígenas, con gran capacidad y paciencia, lograron dominarla y pronto comenzó a ser usada también en los ricos ropajes de reyes, príncipes y el clero español y europeo, así como en las artesanías y tapices, y por supuesto en los óleos.

    El cronista de la conquista y misionero español Bernardino de Sahagún escribió en una de sus obras que "esta grana es conocida en esta tierra y fuera de ella; llega hasta la China y hasta Turquía casi por todo el mundo es preciada y tenida por mucho". La grana tenía la ventaja de que no sólo se utilizaba para teñir textiles y trajes ceremoniales, sino también para pintar códices o cerámica así como para colorear esculturas, templos y murales.

    "La habitación de Van Gogh en Arles" y "La deposición de Cristo", de Tintoretto, son dos de las obras exhibidas por el Museo del Palacio de Bellas Artes, que se exhibirán por primera vez en México en la exposición 'Rojo Mexicano, la Grana Cochinilla en el Arte'.

    Otros autores de renombre incluidos son Zurbaran, Van Dyck, Tiziano, Renoir, Cezanne, y Gauguin, entre otros, que vieron en el rojo mexicano, una posibilidad infinita para imaginar sus piezas y plasmarlas sobre el lienzo.

    El primer textil conocido con elementos de grana en Mesoamérica, el territorio que hoy ocupa México, data de 300 años antes de Cristo, señaló Miguel Fernández Félix, director del Museo del Palacio de Bellas Artes.

    La exhibición estuvo precedida por un gran trabajo de investigación, donde participaron científicos y estudiosos en el mundo de instituciones como el Metropolitan Museum of Art, la UNAM, el Museo Nacional del Prado, el Art Institute of Chicago y Rijksmuseum.

    Más de 100 obras de artistas europeos emplearon grana cochinilla y sólo Van Gogh la usó en 55 de sus piezas. Algunas de las obras fueron cedidas por la National Gallery de Londres, el Metropolitan Museum of Art de Nueva York o el Musée d'Orsay de París. (ANSA).