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AMPLIARMoro le teme a la movilización militante de Lula

Justicia restringe manifestaciones populares en Curitiba en apoyo a Lula

La Justicia brasileña hizo lugar ayer a una demanda de la Alcaldía de Curitiba, sur del país, y prohibió que los seguidores de Lula monten campamentos durante su declaración ante el juez Sergio Moro.

Detalles.

La jueza Diele Denardin Zydek dispuso que a partir de este lunes quedó prohibido organizar actos y montar tiendas de campaña en varios puntos de la ciudad hacia donde viajarán miles de simpatizantes y adversarios del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.

Este miércoles Lula, del Partido de los Trabajadores, será indagado en su condición de procesado, por el juez Sergio Moro responsable de la megacausa por corrupción Lava Jato.

Según estimaciones de algunos medios miles de personas irán en caravana hasta Curitiba.

"El derecho de manifestación no se confunde con la posibilidad de ocupación de lugares con bienes públicos o particulares", señaló la jueza al explicar su decisión.

Más adelante la jueza formuló una recomendación a la Alcaldía de Curitiba para que establezca canales de diálogo con los activistas.

"Es saludable que la parte solicitante (Alcaldía) junto a los movimientos negocie alguna solución a fin de garantizar el derecho de manifestación con algunas limitaciones", señaló Zydek. 

Términos boxísticos por encuentro Lula y Moro 

 "Combate del siglo", "batalla", "circo", estas son algunas de las expresiones con las que fue definido ayer el primer encuentro del expresidente Lula y el juez Sergio Moro, en el marco de la causa por corrupción Lava Jato.

La Policía Militarizada inició un operativo para evitar choques entre los militantes del Partido de los Trabajadores , seguidores de Lula, y los activistas del Movimiento Brasil Libre, que exigen su prisión.

Por su parte el juez Moro responsabilizó ayer a a Lula de alimentar la atmósfera tensa que precede a la audiencia del próximo miércoles en Curitiba, capital del sureño estado de Paraná.

"No se ignora que el acusado pretende transformar un acto normal de un proceso penal en un evento político partidario", afirmó el juez.

Además Moro rechazó un pedido de los abogados de Lula para filmar la audiencia de la que habla todo el país. La radio Jovem Pan informó ayer sobre la expectativa imperante ante "el combate del siglo" mientras la revista Isto E ilustró su portada con Lula y Moro vestidos como pugilistas en el medio del ring.

Fernando Gaveira, ex miembro del Partido de los Trabajadores y actual dirigente ambientalista, afirmó que Moro quiere preservar la "formalidad" de un acto judicial, al contrario de Lula quien busca armar un "circo" porque tiene la intención de ser candidato presidencial en 2018.

Mientras tanto la policía comenzó a censar a los vecinos del 13er. juzgado federal de primera instancia de Curitiba para que sólo ellos puedan transponer las barreras instaladas a fin de impedir la aproximación de los manifestantes a la sala donde Moro interrogará a Lula.

Kim Kataguiri, líder del Movimiento Brasil Libre, anunció que su agrupación comenzó a movilizarse para viajar al sur del país y repudiar a Lula.

"No coincido con los medios que están diciendo que será el combate del siglo entre Lula y Moro, será una audiencia entre un reo y un juez", afirmó el dirigente Kataguiri.

Por otra parte una caravana en apoyo de Lula, que prometió "invadir" Curitiba, fue convocada por el Partido de los Trabajadores, la Central Unica de los Trabajadores y el Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra.

El anuncio se realizó durante un congreso petista en San Pablo donde Lula habló de su ansiedad por verse cara a cara con Moro.

El expresidente uruguayo José Mujica participó de ese evento del PT cuyo titular, Rui Falcao, denunció a Moro de ordenar prisiones por razones políticas y para perseguir a los miembros de su agrupación.

Este lunes comenzaron a realizase diligencias en el juzgado en el marco del proceso contra Lula.

Dentro de esas actividades estaba el interrogatorio al ingeniero Marcos Berty, de la empresa Toyo Setal, vinculado a uno de los dos procesos abiertos contra el ex mandatario que gobernó entre 2003 y 2010.

Por lo pronto Lula es reo en cinco procesos por corrupción, lavado de dinero e intento de obstruir a la Justicia, entre otros cargos.

Moro hizo lugar a dos denuncias de la Procuraduría General de la República sobre el supuesto soborno recibo por Lula da la empresa constructora OAS.

Según la Procuraduría OAS le obsequió un departamento a Lula, como parte de las "propinas" por los contratos millonarios de esa empresa con Petrobras.