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AMPLIARLa relatora ONU remarcó las diferencias en calidades y tipos de viviendas en Chile

Según la ONU, en Chile la vivienda no es para todos

La relatora especial de Naciones Unidas sobre el derecho a una vivienda adecuada, Leilani Farha, reafirmó que "la desigualdad es uno de los rasgos distintivos de la sociedad chilena y esto es claramente evidente en la situación habitacional del país".

Detalles.

Al concluir una visita de ocho días, la canadiense se declaró "horrorizada" por el grado de discriminación que sufren los inmigrantes y sectores más vulnerables de la población como también el pueblo indígena mapuche.

"Al viajar a diferentes ciudades de Chile, he sido testigo de divisiones fuertes e impactantes entre los vecindarios, particularmente respecto al tipo y la calidad de la vivienda, y los servicios que la rodean", declaro en rueda de prensa realizada en la Comisión Económica Para América latina y el Caribe (Cepal).

La abogada planteó recomendaciones inmediatas y urgentes al gobierno chileno, partiendo por una reforma constitucional que deje establecido el derecho a la vivienda adecuada como también los otros derechos sociales.

El reconocimiento de los pueblos indígenas; que se afronte la realidad de la gente en situación de calle y no quede a merced de la caridad; que en los asentamientos informales o campamentos, se garantice el acceso a la luz y el agua potable aunque estén en terrenos privados.

Asimismo, pidió que el gobierno regule el desenfrenado crecimiento de las inmobiliarias que levantan edificios sin considerar el impacto urbano. Admitió que no sólo es una realidad de Chile sino que también ha oído situaciones similares en Brasil y otras partes del mundo. "Es algo muy chocante y se siente el actuar como si hubiera una mafia", describió. Farha cuestionó también la ley chilena de migración que data de 1974 cuando el país vivía bajo dictadura militar. "Es muy anticuada", expresó. Llamó además la atención que para los migrantes "es mucha la espera de tres años para poder postular a una vivienda adecuada", aunque reconoció la política de subsidios de arriendo, "no creo que alcance para todos".

La relatora de Naciones Unidas compartió que es difícil propiciar cambios para un gobierno, más aun cuando "el derecho de propiedad está tan protegido en la Constitución" de 1980. Pero, anotó, las falencias observadas dejan en evidencia una "falta de estado". Ante una consulta de ANSA, expuso que tuvo experiencias de actitudes discriminatorias durante su visita. "Es muy perturbador", afirmó, pero se manifestó convencida de que "el cambio es posible" como lo demuestra la experiencia del mundo homosexual o las personas que viven con Sida que se vieron enfrentados a todo tipo de prejuicios. "El cambio es lento", prosiguió, pero ella se ha propuesto en su tema "martillar" con fuerza que "la vivienda es un derecho y no un commoditie", finalizó.

El informe detallado de las conclusiones será presentado al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en marzo de 2018