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AMPLIARLa violencia domina las calles de Río de Janeiro, con el Carnaval que se aproxima.

Carnaval carioca: Guerra en favelas y turistas extranjeros asaltados

Mientras se apronta el Sambódromo para el Carnaval, la guerra no da tregua en Río de Janeiro donde hay 14 tiroteos por día al tiempo que se multiplican las denuncias de turistas asaltados.

Detalles.

Entre enero y diciembre de 2016 los nueve principales hospitales de Río de Janeiro atendieron, en promedio, a nueve heridos de bala por día, según datos oficiales, analizados por entidades especializadas en violencia urbana.

Las curvas de violencia armada se acentúan durante grandes eventos masivos como el Carnaval y la fiesta de Año Nuevo, el Reveillon, cuando a la violencia cotidiana se suman los ataques a turistas.

Ocupada por las Fuerzas Armadas, Río de Janeiro es una de las ciudades más violentas de América Latina con 14 tiroteos por día, en los que son habituales las "balas perdidas" que matan a ciudadanos inocentes, según informaron especialistas .

Este domingo las bailarinas "bahianas" con sus tradicionales y voluminosos vestidos blancos lavaron simbólicamente el Sambódromo Marqués de Sapucaí.

También hicieron ofrendas a los Orixás para que la paz y alegría reine en los desfiles de las portentosas "Escolas do Samba" profesionales, que comenzarán el próximo domingo 26 de febrero.

Mientras se realizaba ese ritual en el Sambódromo, unas 800 mil personas participaban de los carnavales callejeros detrás de los populares grupos musicales, los "blocos de rua", en sus desfiles junto al mar y por el centro carioca.

Durante este fin de semana se registraron asaltos a turistas extranjeros y brasileños que comenzaron a llegar a la Ciudad Maravillosa, donde muchos permanecerán hasta el martes 28 cuando finaliza el carnaval "oficial" en el Sambódromo.

Un ciudadano estadounidense fue apuñalado mientras participaba, junto a miles de personas y bajo un sol abrasador, en el baile organizado por el grupo Simpatía es Casi Amor, por una avenida junto a la playa de Ipanema.

También el domingo la Policía Militarizada detuvo a cinco jóvenes por robar cadenas y celulares al público que participaba en el popular Bloque de Preta.

La violencia en el "asfalto", es decir las zonas de clase media alta del sur y también en el centro carioca, se multiplican durante el Carnaval, mientras en las favelas la guerra es permanente durante casi todo el año, señala el profesor Ignacio Cano.

Dos niñas, una de 7 y otra de 2 años, murieron recientemente al ser alcanzadas por "balas perdidas" mientras jugaban en barrios pobres donde son habituales los enfrentamientos entre narcotraficantes, policías y "milicias" parapoliciales.

El velorio de la pequeña Fernanda Pinheiro, de 7 años, muerta la semana pasada, contó con la presencia de decenas de vecinos de la favela Complexo da Maré que acusaron a la policía de atacar indiscriminadamente a la población de esa comunidad de la zona norte carioca.

"Es enorme el impacto de esa violencia en las favelas donde además del alto número de vidas perdidas, se pierde el derecho de ir y venir libremente", afirmó hoy Renata Neder, de la organización Rio de Paz.

El presidente Michel Temer envió 9 mil efectivos de las Fuerzas Armadas a Río la semana pasada ante el creciente clima de violencia y una amenaza de rebelión policial, que inició una serie de protestas en vísperas del carnaval.

La capital turística de Brasil parece ser una tierra de nadie, donde el Estado fue desbordado por el crimen organizado y el delito común. Más, debido a la crisis económica, el gobierno carioca redujo las partidas presupuestarias destinadas a la seguridad.

Así los puestos policiales en las favelas cuentan cada vez con menos recursos y los agentes no esconden su disgusto con las autoridades, todo lo cual contribuye al fortalecimiento de los narcos.