AMPLIARLuis De Cándido entrando al TOFLos hermanos De Cándido cada vez más complicados por la causa Coronel
La testigo María Bueno quien declaró por la causa Coronel, expresó que los hermanos De Cándido usurparon las dos viviendas que pertenecían a la familia, luego del secuestro de Marta y Rolando Coronel. “Ellos eran mi familia”, sostuvo. También declaró la mujer de Luis De Cándido quien vivió en una de las propiedades hasta 2004 con su marido.
“María murió por una infección en los pechos debido a las torturas con picana”, aseveró Bueno.
María Blanco residía con Rolando y Marta Coronel, la familia desaparecida en 1976 a quienes además, los hermanos De Cándido les usurparon las dos viviendas, por lo cual están acusados.
“Vivía con ellos porque yo soy huérfana de padre y madre, o sea que Marta y Rolando eran mi familia”, dijo Blanco. La testigo comentó que tenían una casa en calle Chacabuco 478 y otra en la esquina de Fortunato García y Jujuy. “Luego del secuestro me entero de que la usurparon policías. Era un motín de guerra”, sostuvo. Carlos De Candido vivió en la de calle Jujuy y Luis en la otra.
En este sentido explicó que tiempo después, por María Marín quien vivía en el terreno de una de las casas en una prefabricada, y continúa residiendo allí, le confirmó que los De Cándido se quedaron con las casas y Luis vivía con Ana Lía Marteau. Marín declara el miércoles.
Bueno reveló su necesidad de contar estos hechos. “La impotencia de no decir nada la tuve durante 30 años. En aquellos años nos hacían sentir como delincuentes cuando lo único que hacíamos era ayudar al prójimo”, indicó.
¿Sabe como murieron los Coronel?, preguntó la querella
Me enteré que Rolando, en La Jefatura, murió por no soportar la situación, era un hombre mayor y Marta por una infección en los pechos debido a la torturas con picana.
El teniente Cursi les dio la orden a los hermanos De Cándido para que vivan en las casas de los Coronel
Declaró Ana Lía Marteau, esposa del imputado Luis De Cándido. Al principio quería abstenerse porque les corresponde las generales de la ley, es decir es pariente de uno de los imputados. Sin embargo el querellante Emilio Guanini le comunicó que se le iniciará una causa por encubrimiento. La mujer se puso histérica y decidió declarar. “Voy a responder todo, no tengo nada que ocultar”, sostuvo.
En este sentido contó que conoció a su actual marido en 1980, por lo tanto no tenía relaciones antes, cuando se dieron los hechos. También reveló que vivió con De Cándido en la casa de calle Chacabuco hasta el 2004 cuando la justicia ordenó el desalojo, debido a la causa Coronel.
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