La Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía anunció la modificación de los trámites que deben realizar los fabricantes e importadores de productos como aires acondicionados, heladeras, lavarropas y televisores, entre otros.
El Gobierno Nacional continúa con su serie de reformas orientadas a eliminar regulaciones. Esta vez, la medida afecta directamente al sector de los electrodomésticos. Así, la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía anunció este lunes la modificación de los trámites que deben realizar los fabricantes e importadores de productos como aires acondicionados, heladeras, lavarropas y televisores, entre otros.
La medida anunciada por el Gobierno se presenta como una “simplificación” de procesos y asegura que la eliminación de estos controles reducirá los costos para las más de 150 empresas que importan y fabrican electrodomésticos en el país.
Entre los considerandos, la secretaría de Comercio promete una mayor oferta de productos, mayor competencia y una eventual baja de precios. Sin embargo, al suprimir los requisitos de certificación y los controles de eficiencia energética, la nueva normativa podría generar incertidumbre respecto a la calidad y seguridad de los productos que se comercialicen.
Es que antes de esta modificación, las empresas debían someter sus productos a pruebas de eficiencia energética, un proceso que garantizaba el rendimiento y consumo adecuado de los electrodomésticos. Además, los fabricantes y distribuidores tenían que cumplir con auditorías anuales, incluso si sus fábricas se encontraban fuera del país. Estos controles, aunque engorrosos, aseguraban que los productos importados o fabricados localmente cumplieran con las normativas nacionales y no representaran un riesgo para los consumidores.
Eliminación de controles
A partir de la publicación de la nueva resolución en el Boletín Oficial --se espera que se oficialice este martes--, los fabricantes ya no tendrán que realizar el trámite de autorización ante la Secretaría de Industria, ni la verificación de Aduana antes de comercializar los productos. Además, se elimina la certificación obligatoria de eficiencia energética, lo que permitirá a las empresas vender sus productos simplemente cumpliendo con los requisitos básicos y firmando una declaración jurada.
Si bien el Gobierno justifica la medida como un paso hacia la reducción de la burocracia, esta flexibilización podría tener efectos negativos en la calidad de los productos que llegan al mercado. La eliminación de los controles podría permitir que lleguen al país productos con menor rendimiento o, peor aún, con fallas de seguridad.
Impacto en el mercado de electrodomésticos
El sector de los electrodomésticos se enfrenta ahora a un enorme desafío. Por un lado, lidiar con la histórica baja de ventas que lo afecta desde hace 11 meses, y por otro, hacer frente a la llegada de productos al país sin los controles previos, debido a las recientes modificaciones gubernamentales que buscan "simplificar los trámites".
Si bien la promesa de una mayor competencia y la reducción de precios podría resultar beneficiosa para los consumidores, este escenario abre un debate sobre hasta dónde es prudente llevar la desregulación en un mercado tan competitivo, y qué impacto tendrá en la calidad y seguridad de los productos.
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