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AMPLIARLa empresa chilena tendrá que reducir al máximo sus emisiones

Chilena Codelco avanza hacia carbono-neutralidad

La compañía estatal chilena Codelco, principal productora mundial de cobre, estrenó el primer cargador subterráneo 100 % eléctrico de Sudamérica, en línea con su compromiso de alcanzar la reducción de un 70% de su huella de carbono al 2030.

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Con capacidad de 14 toneladas, el equipo LHD (del inglés Load, Haul, Dump; carga, acarreo y descarga) inició su período de prueba piloto en el sector Mina Diablo Regimiento, de la División El Teniente, a 80 kilómetros al

La prueba proyecta validar su funcionamiento en términos de potencia, funcionalidad y consumo de energía en transporte y operación, bajo las mismas condiciones de los otros equipos diésel en mina subterránea.

Junto con evitar la emisión de 433 toneladas de gases de efecto invernadero (GEI) en un año de operación, se ahorrará el consumo de 160.000 litros de diésel en el mismo periodo.

Para la ministra de Minería, Marcela Hernando, esta iniciativa "muestra una voluntad política-estratégica de avanzar en electromovilidad. Sabemos que tenemos el desafío de luchar contra la crisis climática, todos los países tenemos ese compromiso, pero Chile tiene un rol fundamental y es que tenemos la riqueza de aquellos materiales geológicos que nos hace distintivos para esta lucha contra el cambio climático".

"Nuestro compromiso a 2030 es poder reducir un 70% nuestra huella de carbono y uno de los aspectos importantes son los equipos, equipos móviles en el caso de la minería subterránea donde hay mayores facilidades, pero también estamos yendo a buscar minería de cielo abierto, mayores tamaños, mayores capacidades, que necesitamos ir generando en la medida que los proveedores vayan desarrollando esta tecnología. Este es un paso importante para la sostenibilidad en minería", destacó André Sougarret, presidente ejecutivo de Codelco. Este equipo fue desarrollado por Epiroc, empresa de origen sueco que produce y desarrolla equipos de construcción, perforación y excavación de roca.

Además de reducir las emisiones directas de GEI en 100%, su costo de mantenimiento es 60% más bajo, y las condiciones de trabajo que genera son muy valoradas por los equipos a cargo.

"Llevo 12 años operando este tipo de cargadores en su versión diésel. Con el nuevo LHD eléctrico, desde los primeros entrenamientos noté la diferencia en cuanto a calidad de vida.

No es necesario usar tapones para los oídos, porque el ruido es mínimo adentro. Además, el traslado es más suave, casi no hay vibraciones en comparación con las que produce un motor petrolero", contó el operador Miguel Angel Madrid, uno de los conductores entrenados para esta prueba piloto.

El LHD es 100% a batería (sin un cable conectado al enchufe para operar). En testeos técnicos arroja una autonomía de cuatro horas, sin embargo, las pruebas que se están realizando determinarán si este rendimiento se mantiene en el contexto de una mina como Diablo Regimiento, ubicada a unos 700 metros bajo tierra y cuyo centro de operaciones está emplazado a unos tres mil metros sobre el nivel del mar.

Sougarret relevó que el proceso de fabricación de estos equipos es "muy virtuoso para la minería del cobre ya que aporta a la necesaria descarbonización de esta industria". Además, "la electromovilidad, una de las maneras de combatir el cambio climático, es una tecnología intensiva en el uso de cobre. El LHD eléctrico, por ejemplo, requiere de 900 kilos del mineral; un convencional, sólo necesita 120 kilos", explicó.