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AMPLIARNueva constitución hija de las protestas del 2019

Cita dominguera para los convencionales que reformarán la constitución de Pinochet

Paritaria y con 17 representantes de pueblos originarios, también con profesionales predominantemente abogados y profesores, entre un ama de casa, científicos, escritores y periodistas. Los 155 miembros de la Convención Constituyente que redactarán una nueva Constitución son el claro reflejo de "un Chile más real".

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Un Estado social, la plurinacionalidad, los derechos que deben consagrarse, el sistema político, el agua, el medioambiente, son algunos de los temas que empezarán a definir los 155 convencionales en Chile, a menos de 48 horas de la inauguración de la inédita Convención Constitucional, el 4 de julio.

En medio de disputas en las horas previas, la cientista política Lucia Dammert señaló a ANSA que no puede olvidarse que éste "es un proceso inédito que viene a resolver una crisis política" derivada de la revuelta social del 18 de octubre de 2019, "por lo que el ruido que estamos sintiendo, ya estaba instalado".

Para Claudia Heiss, académica de la Universidad de Chile, "lo que está en disputa es el nivel de autonomía de la Convención".

En diálogo con ANSA, sostuvo que el gobierno de Sebastián Piñera "se ha equivocado en decir que los convencionales asumían de acuerdo al artículo XV de la Constitución de 1980 o que la secretaria general de la Presidencia elegiría las sesiones que va a transmitir a la ciudadanía".

Pero tanto Dammert como Heiss coincidieron en que "esto va a pasar, van a instalarse y empezar a discutir los temas sustantivos".

Compartieron también que es inevitable que la campaña presidencial y parlamentaria va a contaminar el debate estos primeros meses fomentando la polarización.

No obstante, apuntó Dammert, también el año pasado se creía que Chile previo al Plebiscito de octubre estaba muy polarizado y los resultados mostraron que era 80/20 a favor de una Constitución y que fuera redactada por una Convención totalmente elegida.

En los temas sustantivos convinieron que deberán definir el rol del estado y la forma en que se establecerán los derechos sociales o los de segunda generación, como la vivienda.

La plurinacionalidad tomará mayor relevancia con la presencia de los 17 escaños reservados de los pueblos originarios que van a defenderla.

El derecho al agua, consagrada en la actual Constitución como un bien privado, será otra materia importante en la discusión, pues "es una especifica que lleva muchos convencionales independientes", apuntó Heiss.

El medioambiente, impulsado también por varios dirigentes sociales que fueron elegido convencionales y que "lo entienden como un recurso fundamental y no sólo para explotar", acotó Dammert.

El régimen político será otro punto a discutir dado el exacerbado presidencialismo de la actual Constitución y ya algunos se pronuncian por un semi-presidencialismo o parlamentarismo.

Para Heiss, la agenda feminista tendrá también importancia, pues por primera vez un órgano del Estado cuenta con paridad de género y eso tendrá consecuencias para el futuro. Otros temas son la descentralización, hay una fuerte presencia de dirigentes con representación territorial; y la inclusión que pueda llevar a un cambio de las reglas, como la creación de mecanismos de control ciudadano, las consultas ciudadanas, las acciones afirmativas.

Lucia Dammert, académica de la Universidad de Santiago, señaló que pese a la tensión de estos primeros meses también habrá un "aprendizaje nuevo, una gimnasia del trabajo que va generando confianzas entre los mismos constituyentes".

En su opinión, "después del tema electoral, va a haber otra rutina y ahí se verán los temas más difíciles".

Claudia Heiss completó que "es inevitable que la elección tanto presidencial como parlamentaria va a influir, y cómo el Congreso quede constituido porque va a haber una interacción que es compleja, entendiendo que la Constitución de 1980 todavía está vigente".

Pero, subrayó, "los convencionales se están organizando bien, se están conociendo, están viendo la presidencia y vicepresidencia, y unos están planteando que sea rotativa",