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AMPLIARLa violencia y los ataques relacionados al género. Un dilema en Chile (foto: Ansa)

Chile clama contra la violencia a LGBTI

La Fundación iguales -defensora en Chile de los derechos de la población LGBTIQ+- lanzó una plataforma para conocer la probabilidad de sufrir un ataque de odio por expresión de género, y así presionar al gobierno de Sebastián Piñera a que tome medidas efectivas.

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Durante los últimos meses, la cantidad de crímenes contra personas lesbianas, gay, bisexuales, transgéneros, y queer (en proceso de averiguarlo) en Chile ha ido en aumento.

De acuerdo a datos de Iguales, dos de cada tres personas advierten haber sufrido una agresión verbal en los últimos cinco años. Una de cada cuatro una agresión física alguna vez en su vida por su orientación sexual, identidad o expresión de género, siendo el espacio público el principal escenario para estas situaciones. En cuanto al agresor, solo la mitad de las veces suele ser una persona desconocida.

La directora de Fundación Iguales, Isabel Amor, explicó en diálogo con ANSA que la iniciativa apunta a involucrar a toda la sociedad, "necesitamos un compromiso país" porque "cuando dañas a una persona de la diversidad de género no sólo la dañas a ella, sino a su pareja, a su familia, a sus amigos".

Y la violencia no solo afecta a la población homosexual, añadió. Puso como ejemplo que "hoy está de moda en los hombres pintarse las uñas, y ese solo hecho te puede significar muchos ataques, aunque seas cisgénero".

Las palabras de Amor coinciden con la encuesta realizada a la población LGBTIQ+ por la subsecretaría de Prevención del Delito, la cual constató que en el último año, y bajo pandemia, la discriminación se expresó en insultos (49,1%); gritos u hostigamientos (35%); obligación para cambiar de apariencia (26,2%); falta de respeto a la identidad de género (18,4%); sanciones por la expresión de la identidad de género o la orientación sexual (7,8%); expulsión o prohibición de entrada a algún lugar (6,6%). Además, obligación para someterse a pruebas de VIH o ITS (2,9%); negación o dificultad para el registro de la identidad (2,4%); negación para la entrega de retrovirales (0,7%); obstáculos para ejercer el derecho a voto (0,4%). En el mismo período, al 45,2% de las personas trans las ridiculizaron llamándolas en voz alta por su nombre legal y al 5,9% le negaron la entrega de reemplazo hormonal.

En este escenario, pero yendo más allá del mundo homosexual, la nueva plataforma de Iguales se enmarca en la campaña No Más Leyes con Nombre que tiene por objetivo sensibilizar con respecto a mejorar la actual Ley Antidiscriminación -surgida tras el brutal ataque que sufrió el joven Daniel Zamudio por parte de un grupo neonazi que le provocó la muerte tras una dolorosa agonía- para que tenga efectos reales frente a la prevención de crímenes de odio.

La plataforma se hizo en base a sondeos previos que involucraron a más de 3.000 personas, incluidas personas heterosexuales cisgéneros, el cual arrojó que un 18% de las personas encuestadas que no son parte de la diversidad sexual y de género conoce de manera personal a una persona LGBTI que había sufrido una agresión física en los últimos 5 años, mientras que el 59% dijo lo mismo respecto a una agresión verbal.

La iniciativa de Iguales cuenta con el apoyo de All Out, cuyo director regional para Latinoamérica, Leandro Ramos, sostuvo que Chile será el primer país en presentar esta plataforma pero que el objetivo es poder regionalizar la herramienta y así incentivar a que todos los países del continente tomen medidas de erradicación de la violencia hacia la diversidad sexual y de género.

All Out ha "acompañado con mucha preocupación la creciente ola de crímenes contra personas LGBTIQ+ en Chile desde el año pasado. Por eso decidimos sumarnos a Fundación Iguales para mostrarle al gobierno chileno que miles de personas en todo el mundo esperan que actúen con rapidez para frenar la violencia", apunto Ramos.

La directora de Fundación Iguales, Isabel Amor, relevó que la organización "tiene una política de cero tolerancia a la violencia hacia las personas LGBTI" y que "los números hacen evidente la necesidad de devolverle la urgencia a las demandas de la diversidad sexual, a contar con una inclusión plena a nivel de derechos y beneficios, y para ello, lo primero que tenemos que hacer es establecer que las demandas de seguridad e inclusión, así como la de matrimonio igualitario, no son cosas de nicho sino del grueso de la población".